Subiendo
por la calle de Santa María, llegamos a una plaza, donde se encuentra el
Convento de Santa Clara. Desde el año 1975 es el ayuntamiento de la ciudad.
El
convento de Santa Clara fue levantado en el siglo XVI y se convirtió en uno de
los más ricos de Guimaraes. Se hizo muy famoso gracias a los dulces que
preparaban las monjas.
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