Iglesia de Nuestra Señora Triunfante - Niño Jesús de Praga (Kostel Panny Marie Vítězné)
La construcción, del barroco temprano, data del año 1611, reconstruida luego (1634 – 1669) por la orden carmelita. La iglesia se conoce sobre todo por la famosa escultura del Niño Jesús de Praga, que proviene de España y fue regalada a los carmelitas por Polyxena de Lobkovic (1628). El Niño Jesús tiene 2 coronas y unos 46 vestidos diferentes que, según una costumbre atávica, se le cambian diez veces al año. Con los vestidos y otros complementos litúrgicos se ha construido un pequeño museo.
Historia del edificio
La iglesia fue construida en los años 1611 y 1612 por los luteranos alemanes y dedicada a la Santísima Trinidad. Se desconoce el nombre del arquitecto de este edificio barroco más antiguo de Praga. Sin embargo, la construcción se parece mucho a la iglesia de Neuburg an der Donau creada por el artista de la corte rodolfina, Josef Heintz. Es probable que su diseño fue finalizado por el arquitecto imperial Giovanni Maria Filippi. Tras la victoria de la contrarreforma, Fernando II donó la iglesia en 1624 a la Orden de los Carmelitas Descalzos en recompensa por su contribución a la victoria del ejército imperial en la Batalla de la Montaña Blanca. Los monjes carmelitas dedicaron la iglesia a Nuestra Señora de la Victoria, la reconstruyeron y junto a ella erigieron su monasterio. La construcción de la fachada principal que se conservó hasta hoy fue financiada por el general Baltasar de Marradas y realizada entre 1636 y 1644. La entrada a la iglesia original luterana se encontraba en el lado de Petřín y el altar, como era de costumbre, daba hacia el este. Para diferenciar el estilo católico del original de los protestantes, la entrada a la iglesia fue trasladada al lado opuesto, o sea a la actual calle Karmelitská. En la época barroca la importancia del concepto del edificio en su totalidad empieza a prevalecer sobre la tradición de la orientación de las iglesias. Los monjes carmelitas ampliaron la sencilla iglesia original de una nave con una torre y agregaron un coro y un presbiterio profundo. Junto al monasterio establecieron el Jardín del Seminario con estanques artificiales donde criaban ranas y peces para la comida cuaresmal. El monasterio fue abolido en 1784 bajo José II y la iglesia quedó a cargo de los Caballeros de Malta. En la actualidad está de nuevo administrada por los monjes carmelitas.
El altar mayor barroco de 1716 destaca por su característica alternación de los colores negro y dorado. Fue remodelado por Jan Ferdinand Schor y está adornado con una nueva estatua de la Virgen, obra de Jindřich Čapek, el Viejo. En la pared del presbiterio está la pintura del profeta Elías realizada por Petr Brandl al igual que las pinturas en los altares laterales: San José, San Simón y San Joaquín con Santa Ana del año 1722. El altar de Santa Teresa luce pinturas de Johan Georg Dietrich y esculturas de Jan Jiří Bendl. La mayor parte de las obras que decoran el interior de la iglesia datan de los siglos XVII y XVIII. Al lado izquierdo de la entrada está una pila bautismal de estilo gótico tardío en mármol, trasladada aquí desde la Iglesia de Nuestra Señora bajo la Cadena.
La torre de la iglesia alberga tres campanas. Dos de ellas son originales, aunque se las tuvo que volver a fundir. La de sonido más profundo, obra del maestro campanero Brikcích z Cimburku del año 1595, recibió el nombre de Jan Hus, sin embargo después de su segunda fundición en 1829 el maestro campanero Karel Bellman le puso el nombre de San Juan Bautista. La campana más pequeña lleva el nombre de Jerónimo. Las dos datan de los tiempos de la administración luterana de la iglesia. Sólo la tercera campana fue procurada por los monjes carmelitas en 1718.
Debajo de la iglesia se extiende una amplia cripta del año 1666 que acogía a los ataúdes de los monjes carmelitas y sus seguidores de los siglos XVII y XVIII. Sin embargo, la cripta está en una condición deteriorada a causa del agua que había penetrado en ella repetidas veces, dañando un gran número de los cuerpos momificados. Más de 200 personas habían sido enterradas aquí antes de 1716. Además de los monjes carmelitas reposaban aquí por ejemplo el comandante español Don Baltasar de Marradas, Barbora de Wallenstein, la casa de los Dietrichstein, e incluso Terezie Fröhlichová, famosa por su belleza, quien, dice la leyenda, murió aquí el día de su boda con un novio al cual no quería. Se han conservado también algunos ataúdes con restos mortales de niños. La mayor parte de la cripta pasó por una renovación en los últimos años, fueron removidos los ataúdes originales pintados y decorados con hierro forjado y la mayoría de las momias fueron trasladadas. Sólo tres cuerpos mejor conservados permanecieron en la cripta en unos ataúdes de cristal. La cripta está cerrada al público.
Desde el año 1628 la iglesia acoge a la famosa estatuilla del Niño Jesús de Praga, conocido en los países católicos como Bambino di Praga. La imagen llegó a Bohemia a mediados del siglo XVI con María Maximiliana Manrique de Lara, novia de Vratislav de Pernstein. María después regaló la estatuilla, protectora del hogar, a su hija Polyxena en ocasión de su boda con Vilém de Rosenberg. Después de la muerte de Vilém, Polyxena recién tuvo un hijo, Venceslao Eusebio, con su segundo esposo Zdeněk Popel de Lobkowicz. Según la tradición, la imagen tenía que pasar de madre a hija, por eso Polixena se la regaló a la Orden de los Carmelitas. Más tarde se le atribuyeron una serie de milagros de protección durante la peste, saqueo, etc. porqué el monasterio permaneció a salvo en varias ocasiones. En la época de la Guerra de los Treinta Años la imagen se perdió, en 1638 fue encontrada detrás del altar con los brazos desprendidos y tuvo que ser arreglada. En 1651 fue llevada en procesión por Praga y recibió el sobrenombre del Misericordioso Niño Jesús de Praga. Después de la disolución del monasterio el Niño Jesús fue cuidado por las hermanas de la orden de Vírgenes Inglesas. La gente desde siempre acudía a la imagen pidiendo ayuda, la devoción a ella es muy popular en España, Italia, en los países de América Latina y en Filipinas. De hecho, la imagen del Niño Jesús ayudó hace 400 años a los misioneros en su esfuerzo de unir Filipinas. Una copia del Niño Jesús donada en esa época se convirtió en objeto de devoción común, símbolo de la unión en el archipiélago desgarrado permanentemente por conflictos.
La célebre imagen es una estatuilla creada en España en el siglo XVI. Tiene 45 cm de altura, la base de madera está revestida con lienzo y cubierta con cera. Su cabello, oscuro originalmente, fue colorado más tarde de rubio. Su mano derecha está levantada para la bendición, la izquierda sostiene un globo terrestre dorado con una cruz y su pecho está adornado con una cruz grande. La imagen se encuentra en el altar del centro en el lado derecho, creado en 1776 de mármol artificial por František Lauermann y decorado con estatuas de Petr Prachner. En 1741 el orfebre del Barrio Chico, Jan Pakeni, creó una cajita de plata para la imagen.
El Niño Jesús utiliza dos coronas y alrededor de 46 trajes. La tradición de vestir al Niño Jesús es muy antigua, al igual que el cargo de su guardarropas, conferido desde 1747 a las Vírgenes Inglesas. El Niño Jesús cambia el traje diez veces al año, de acuerdo a la época. En Pascua está vestido de blanco, en Pentecostés de rojo, durante el adviento de morado, etc. El traje más importante fue bordado por la misma María Teresa (traje verde con bordado de oro), el vestuario comprende también trajes de Vietnam y China o el traje obsequiado en 1996 por la familia noble española Manrique de Lara, confeccionado de una antigua vestidura sacerdotal. Una selección de trajes y otros objetos religiosos están expuestos en un pequeño museo.
Una copia de la estatua de Nuestra Señora de la Aparecida, lugar de peregrinación (Brasil), fue instalada en un altar lateral el 17 de septiembre del 2007.
En el año 2008 finalizó la restauración de la pintura de Nuestra Señora de Mantua ubicada en la ábside
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