De estilo tardorománico, aunque reformada en el s. XVI, es el templo más importante de todos los que se encuentran dentro de las murallas. Situada en la Plaza de Santa María, fue probablemente edificada en un solar que estuvo ocupado con anterioridad y hasta el s. XIII por una mezquita musulmana.
En esta iglesia de tres naves cubiertas con bóvedas de crucería, se puede observar su magnífico retablo mayor, uno de los tesoros de este templo acabado por Fernando Gallego a finales del s. XV, con tres cuerpos y siete calles donde destacan los óleos que reproducen la vida de la Virgen y la Pasión de Jesús.
No hay comentarios:
Publicar un comentario