Biserica Episcopala Manastirea Curtea de Arges.
Iglesia Episcopal del Monasterio de Curtea de Arges.
Biserica Episcopala Manastirea Curtea de Arges.
Iglesia Episcopal del Monasterio de Curtea de Arges.
Biserica Episcopala Manastirea Curtea de Arges.
Iglesia Episcopal del Monasterio de Curtea de Arges.
Iglesia de Sta. Filoteia.
Iglesia de Sta. Filoteia.
Curtea de Argeș (en húngaro:
Argyasudvarhely) es una ciudad de Rumania en el distrito de Argeș.
Es una de las ciudades más antiguas de
Valaquia y de Rumania, situada en la ribera oriental del río Argeş, que fluye a
través de uno de los valles, de los bajos Cárpatos, o montañas Făgăraş y que se
halla en la vía que une a las ciudades de Piteşti y Turnu Roşu Pass.
Se encuentra a una altitud de 424 msnm a
152 km de la capital, Bucarest.
Sobre la base de la tradición, Curtea de
Argeş fue fundada en el siglo XIII por el príncipe Radu Negru, como capital del
reino de Valaquia. Su nombre, en rumano, quiere decir "corte del (río)
Argeş".
Esta pequeña ciudad tuvo gran
importancia durante la dinastía de los voivodas Basarab, antes de que la corte
se trasladase a Bucarest.
La ciudad sirvió de emplazamiento a
varias iglesias medievales, entre ellas la catedral de Curtea de Argeş que fue
construida, en el año 1290, cuando la ciudad era aún un pequeño poblado.
Otra iglesia importante es la Biserica
Domnească (Iglesia Real) construida por Mircea el Viejo, monarca de Valaquia
que reinó entre 1386-1418, cuya estructura semeja una fortaleza de piedra,
conectada a través de catacumbas con una atalaya situada en una colina cercana.
Los vestigios del que fuera el Palacio del Príncipe, aún existen en el lugar.
Curtea de Argeş es una ciudad de
variadas actividades culturales con diversos festivales de música y de poesía.
Al norte se encuentran las ruinas del
auténtico Castillo de Drácula, el Castillo Poenari.
El
monasterio de Curtea de Argeș es la joya del arte bizantino rumano,
impulsada por Neagoe Besarab y rematada por Radu de la Afumati en la primera
mitad del siglo XIV. En la decoración se pueden distinguir los elementos de
arte oriental, no en vano Neagoe Basarab había sido educado en la corte de
Estambul.
El pintor Dragomir pintó la iglesia con
sus frescos, que se vieron dañados con las restauraciones tras un terremoto
(los que sobrevivieron están en el Museo de Arte de Bucarest). Sin embargo la
belleza de su interior con mármoles traídos expresamente desde Bizancio y con
una decoración reciente pero de gran colorido y luz son incuestionables. La hoy
sede episcopal también vela por las tumbas del mismo Neagoe Besarab y otros
príncipes.
Una de las historias más curiosas de la
ciudad de Curtea de Arges es la de la Fuente Manole, frente a la iglesia, que
sin captar la atención por su especial belleza esconde una leyenda trágica, y
al mismo tiempo uno de los mitos más conocidos de Rumanía.
Se cuenta que el príncipe Radu Negru
solicitó al maestro arquitecto Mesterul Manole la construcción de la catedral.
Él y sus nueve aprendices trabajaban duramente todo el día pero por la noche la
estructura se venía abajo. El príncipe impaciente les instó a terminar o a
sufrir su cólera. Nerviosos ante las prisas acordaron realizar un sacrificio
tal y como antiguamente se hacía para consagrar un templo. Por tanto, la
primera mujer que apareciese al amanecer del siguiente día, sería la
sacrificada. Ana, la mujer de Manole apareció y el arquitecto cumplió su
palabra emparedándola entre los muros de la iglesia. Esa noche y ninguna de las
siguientes volvió a derrumbarse la edificación, y hoy una placa en las paredes
de la catedral indica donde se enterró a la mujer de Manole.
La desgracia de Manole no acabó aquí
puesto que el príncipe, una vez terminada la obra, encerró en lo alto de una
torre al arquitecto y los aprendices pare que nunca pudieran construir un
templo de igual belleza. Manole, cuyo ingenio superaba con creces al de los
aprendices, confeccionó unas alas al estilo de Ícaro, y pudo planear hasta la
tierra, cayendo en el lugar donde brota el agua de la fuente, que se construyó
en 1804.
Catedrala
Arhiepiscopală Regală
Biserica
episcopală Iglesia de Santa Filofteia.
Una hermosa iglesia ortodoxa con una
iconografía increíble.
En el interior puedes rezar a las
reliquias de la Santa Filofteia, (tenía doce años cuando murió).
La iglesia es grande, con una rica
ornamentación y una gran iconografía.