jueves, 7 de junio de 2012

Celler Cooperatiu (ES Sindicat)




La Bodega Cooperativa de Felanitx es una obra única en Mallorca que se encuentra situada en la localidad de Felanitx. Por su tipología y funcionalidad, fue la más grande de las bodegas de vinos mallorquines. Está situado bajo el monte de la Mola y se puede acceder desde la calle de Guillem Timoner. Es un recinto donde es elaborado y sometido al envejecimiento o maduración del vino y gestionado por el conjunto de socios que forman la cooperativa voluntariamente, implicando un compromiso de participación activa.
Historia
Fue en la estación enológica, fundada en 1913, donde se gestó la idea de crear una Bodega Cooperativa, que fue conocida como el Sindicato. La sociedad cooperativa fue fundada en 1919 por Bartomeu Vaquer Veny, entonces presidente de la Cámara Agrícola y Miquel Caldentey cortadas, presidente de la Caja Rural de Felanitx. Fue un proyecto ambicioso ideado por el ingeniero agrónomo Ernest Mestre, director de la Estación Enológica que proyectó la planta y el alzado del edificio. El sindicato o la Bodega Cooperativa fue edificada entre 1920 y 1922, siguiendo unos planos modernistas del arquitecto Guillem Forteza Piña.
La Bodega, fabricó y vendió un producto que hasta 1923 sólo se comercializaba en el municipio de Felanitx. Pero los años pasaron y paralelamente al nuevo nacimiento de las denominaciones de origen la venta se extendió a lo largo de la isla con el objetivo de dar salida a la cosecha de los campesinos que no tenían bodega propia y tenían que malvender su producción.
A partir de 1990, la Bodega Cooperativa comenzó a mostrar síntomas evidentes de declive. Una reducción de plantilla y una deuda de más de 130 millones de pesetas remató el sueño industrial del municipio de Felanitx. En los primeros años del 1990, pasó a manos de La Caixa, que administró sus deudas hasta que finalmente decidió subastar al gran público.
En 1992, pasó a manos del bodeguero de Binissalem Pau Ripoll Pol, adelantándose a un grupo de inversores británicos, este propietario sólo quiso mantener la esperanza de hacer renacer el Sindicato, hasta que por un golpe de mala suerte le quitaron a su socio, aunque todavía perdura la esperanza.
Arquitectura
·       Exterior
La fachada se encargó al arquitecto Guillem Forteza Piña. Las obras comenzaron en 1919 y en 1921 ya estaba en funcionamiento. Para la construcción se utilizaron materiales industriales, como el hormigón y el cemento, combinados con piedra para determinandos elementos de la fachada. Presenta una fachada monumental dividida por pilastras entre las que se disponen ajimeces. En la zona central, se abre un portal de medio punto, rematado por un ático curvilíneo con un medallón central. La fachada lateral, está estructurada a partir de hastiales mixtilíneos coincidentes con los faldones de las naves del edificio. También aparecen los ajimeces y pilastras de sillares bocelados que forman fajas verticales.
·       Interior
El espacio interior, condicionado por el uso industrial, se estructuró a partir de grandes arcos de diafragma ojivales de hormigón que sostienen la cubierta con vertientes que se combinan con otros arcos menores de medio punto y parabólicos que aumentan el dinamismo del espacio interior. Esta solución de ingeniería técnica recuerda el sistema utilizado por las iglesias góticas catalanas, pero aquí tiene una actitud funcional, lo que contrasta con la estética neobarroca de la fachada.
·       Actualmente
Desde finales de la década de 1990 está tapiado, olvidado y víctima de acciones vandálicas.


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